Experiencia en África: compartimos nuestro conocimiento sobre el Aloe Vera en Etiopía
Hoy queremos hablaros de Ángel Olaran, un ejemplo de humanidad y sacrificio que nos ha conmovido y con quien hemos tenido la oportunidad de colaborar en la formación de personas de la zona rural de Wukro y la región de Tigrey (Etiopia), en el cultivo y usos del aloe vera en su día a día.
Ángel Olarán llegó a Wukro en 1991 y desde entonces, ha transformado la vida de muchas personas haciéndolas partícipes de su propio desarrollo. En estos 25 años de esfuerzo y trabajo en la zona, no sólo ha conseguido el objetivo de crear la escuela St. Mary, si no que con un equipo de colaboradores ha abarcado muchos más ámbitos.
Principalmente su organización se dedica a: proporciona apoyo social y económico a los huérfanos, a las madres indigentes, a las víctimas del VIH/SIDA, a las personas ancianas y discapacitadas que viven en extrema pobreza, a concienciar en todos los temas relacionados con el VIH/SIDA, a proporcionar servicios de créditos a la parte de la población desvalida para que se puedan ser independientes.
Para la mayoría de la población de Wukro y de las áreas circundantes, la agricultura de secano de subsistencia constituye su principal sustento. No obstante, Wukro y sus alrededores sufren con frecuencia periodos de sequía que tienen graves consecuencias para las condiciones de vida de la población rural.
A pesar de ello tras años de trabajo, actualmente en Wukro crecen zonas verdes y árboles que dan cobijo bajo su sombra a aquellos que huyen de las fuertes horas del sol.
El Aloe Vera se está convirtiendo en un cultivo con potencial y desde nuestro extenso conocimiento de su cultivo, usos alimenticios y cosméticos y sus enormes propiedades para la salud, hemos querido contribuir de la mano de Ángel, al desarrollo de este pueblo a través de la formación.
Para ello nuestro compañero Andrés López Alarcón de la Lastra, ingeniero agrónomo y gran conocedor del aloe, se ha desplazado unas semanas a la zona para formar a hombres y mujeres de Wukro y la región de Tigray en la recolección de las hojas de aloe vera, su limpieza, corte y transformación en gel de aloe vera, champú (utilizando además plantas aromáticas), y zumo de aloe vera, para aumentar los recursos alimenticios y cosméticos que puedan beneficiar a su salud, y mejorar su calidad de vida.
La experiencia ha sido una gran oportunidad de poner nuestro conocimiento al servicio de personas valiosas y capaces, con ganas de aprender, pero necesitadas de recursos, colaboración y formación, que les permitan vivir dignamente a través de su propio trabajo.
Abba Malaku, es el nombre con el que es conocido Ángel en la ciudad de Wukro, Etiopía, Malaku y significa «Mi Ángel», y no es para menos, porque eso es para todas estas personas a las que dedica su vida. ¡Gracias Ángel, volveremos!